sábado, 19 de abril de 2014

Andrés Garagy Albújar: Nuevos retos para la formación de comunicadores

Tenemos que formar un nuevo periodista. Y no hay que partir de cero, simplemente hay que ver al pasado. Volver a nuestras raíces. Regresar a las fuentes. La anécdota sobre Ben Bradley lo muestra claramente. Me encanta porque creo firmemente que debemos leer a Shakespeare, o a Flaubert, o a Stendhal, o a cualquier otro pero que sea bueno. Que haya profundizado en las complejidades del alma humana. Porque viendo y reflexionando sobre la vida de Otelo, Emma Bovary o Julien Sorel, conoceremos más de esa complejidad y se podrá contar mejor la historia. Finalmente los periodistas somos contadores de historias.

No conozco a Andrés Garagy pero no hace falta. Esta reflexión sobre el futuro del periodismo lo pone de este lado. Del lado de aquellos que queremos mejorar el oficio que tanto amamos.

miércoles, 9 de abril de 2014

Gabriel García Márquez: El mejor oficio del mundo



Amo a Gabriel García Márquez. Aprendí a escribir leyendo sus Textos Costeños, maravillosa obra que recopila sus artículos de joven en El espectador de Colombia. Nada más. Nunca llevé un curso de redacción o periodismo, aprendí el oficio leyendo esos artículos de Gabo y por supuesto en las redacciones.

García Márquez es la voz más autorizada del periodismo en esta parte del mundo. Si los que hablan y piensan en inglés tienen a Capote, Mailer y Wolfe como sus referentes del Nuevo Periodismo, Gabo no es menos que ninguno de ellos. Y la verdad creo que es más. En el siguiente texto habla del periodismo, de lo que fue y de lo que es. El Mejor Oficio del Mundo es una lectura imprescindible si queremos entender la crisis de este oficio que tanto amamos.

miércoles, 2 de abril de 2014

César Hildebrandt: A los chicos de la UPC



En los últimos años César Hildebrandt se ha convertido en el referente periodismo peruano. Desde que empezó, destacó por la rigurosidad en sus investigaciones. Sin embargo creo que en los últimos diez años ha mostrado su mejor versión. La de maestro, la de teórico del periodismo. Podría poner varios textos pero escojo este porque creo que muestra gran parte del problema, no solo del periodismo sino de la cultura moderna: el de las ideas que se imparten en los centros de enseñanza superior. Ahí nos empiezan a vender la idea del todo vale, la filosofía del empujón como forma de vida, la del pisotón al prójimo como ideología.
Disfruten.

La crisis del periodismo

El periodismo vive la mayor crisis de su historia. Según creo esta situación tiene hasta tres vertientes. La primera tiene que ver con la nueva generación de periodistas. Hoy son pocos los que se preocupan por saber más. Casi nadie lee. La mayoría pareciera que llega a la facultad con el sólo objetivo de encontrar la fama. De ser mediáticos. A eso hay que sumarle una abulia galopante que convierte a los libros en los peores enemigos, al “copy-paste” en el argumento intelectual más usado y a la responsabilidad en una pieza de museo digna de figurar junto al diplodonte o al velocirraptor. Llegar tarde, no cumplir, es algo que el cerebro moderno no registra como malo. Esta situación se traslada del ámbito educativo al profesional. Es lógico que quien no se formó en los rigores de la investigación en las aulas, no lo hará en el trabajo. Salvo excepciones, el nivel de los periodistas es muy malo.